El Galatea,septiembre de 1974


Era el 1 de septiembre de 1974 cuando, procedentes de varios puntos de la geografía española, y haber superado el CIM de San Fernando, los aprendices y futuros contramaestres pisamos tierra gallega. Nuestros comienzos en el cuartel de marinería de San Fernando (Cádiz) nos adentraban en la férrea disciplina militar para, una vez asignada la especialidad, ser destinados a las diferentes escuelas de especialistas tras un merecido mes de descanso. En nuestro caso a la escuela de maniobra Galatea.

A pesar de los años transcurridos, aún nos queda grabada la imborrable y nítida imagen tan entrañable, de un mítico buque escuela Galatea mecido por las verdes aguas del Atlántico.
En aquel día plomizo, oscuro y lluvioso, nos daban la bienvenida tres mástiles cruzados y un bauprés, que a ras del espigón, enfilaba hacia la rampa de Mugardos. La bajamar obligaba a bajar el portalón, dado que la borda del buque estaba más bajo que el pantalán del muelle. Una sensación de cansancio e incertidumbre nos invadía ante el desconcierto del nuevo destino y, por primera vez, bajo la incesante lluvia y el trinar de los silbatos, adivinamos el significado de esa mezcla de nostalgia que conduce a ese otro estadio más profundo que es la morriña.

Por la mañana, la sensación de desesperanza seguía rumiando en el interior de nuestras apesadumbradas mentes. Al alba, desayunamos chocolate con leche en polvo servido en gaveta, tres naranjas y galletas de la Factoría de Subsistencias… y tras formar para la revista de cubierta, nos prepararon para la presentación del profesorado y resumen del contenido académico: Maniobra; Navegación; Meteorología; Nomenclatura del Buque; Seguridad Interior; Señales por Scott, Semáforo Banderas y Gallardetes; Salvamento y Supervivencia; Reglamento para Prevenir Abordajes en la Mar; Aprovisionamiento, Estiba de la Carga, Velamen y Nociones de Construcción Naval.

En la meridiana solar de las doce, el bricbarca Galatea estaba en todo su esplendor. Hacía un sol radiante que iluminaba la ría de Ferrol y la línea de flotación del velero, coincidiendo con la pleamar emergía sobre el firme del muelle.
La blancura radiante del casco y su esbelta y sinuosa figura, casi coqueta; la Nereida Galatea del mascarón de proa que relucía reverberando sobre las aguas; y por aura, una arboladura de cruces alzadas a un cielo reflejado…nos hicieron sentir orgullosos de haber llegado a la base naval de La Graña y de ser un miembro más del nuevo curso de Maniobra en un viejo velero del siglo diecinueve.

A los especialistas se nos inculcaba que teníamos que ser formados para el mando, pues era nuestro futuro, así que nos tocaba dirigir las formaciones: “de frente ar”, “fir...es” y siempre salía una voz de mando con voz aniñada. A modo de mofa el sargento exigía darla con voz grave y aguardentosa, vamos, que lo suyo sería beber alguna copa que otra. Las de ponche eran tradición en la pequeña cantina desde donde se divisaban, a través de los ojos de buey del costado de babor, las grises aguas que bañaban La Graña.

En tiempos de la dictadura militar la insubordinación se castigaba en el acto y la obediencia era debida. ¿Los castigos por las cosas más tontas?, pues si: un baldeo de castigo, achicar botes, una limpieza de sollados por no responder un tema en clase, una imaginaria y un sinfín de quehaceres que necesita el mantenimiento de un buque de vela.
Con este preámbulo comenzamos esta nueva andadura ya lejos del entorno militar, pero conservando esa impronta imborrable, que a pesar del paso del tiempo, nos une en un lazo de amistad y compañerismo.

Quien iba a decir que después de 43 años, quedaríamos preplejos e ilusionados al poder reencontranos una promoción, de ya no tan jovenes muchachos, que quedamos unidos por un patrón común, el comienzo de una vida adolescente en un ambiente naval que nos ha marcado para siempre.
Intentaremos contar anécdotas, vivencias, sentimientos y todo lo que gráficamente podamos aportar, para hacer más vívidos, esos recuerdos que tenemos almacenados en nuestras mentes, pero que seguro saldrán de nuestra memoria como si de ayer se tratara. Un abrazo a todos.


En estos 45 años de nuestro ingreso en la Marina, se ha desarrollado nuestra actividad laboral llena de desafíos, muchos de nosotros continuamos en la mar y los barcos, con un tesón y esfuerzo que nos demandaron un doble sacrificio, la dura vida a bordo y el alejamiento por largos periodos de la familia y amigos.

A otros, nos tocó volver a empezar de nuevo, por la insensatez de dejar una carrera que nos prometía un porvenir en un ámbito laboral duro, pero estable. Por ello, tuvimos que afrontar problemas de falta de trabajo, y desaprobación familiar por el abandono del que ya habíamos conseguido en la Marina,  pero a pesar de ello, no nos quedó más remedio que mirar al frente  y continuar creciendo.

Tanto unos como otros,  formamos nuestras familias, nacieron nuestros hijos, hicimos grandes amigos y compañeros a lo largo de nuestras vidas y ahora comenzamos a recordar nuestras vivencias de ese largo  pasado, dulcificado como un buen vino, por el paso del tiempo.

De todas formas, no sé que tendrá la Armada o la Marina como cada uno le apetezca deniminarla, pero para todos nosotros ha sido una gran oportunidad, la  de participar en una hermosa experiencia, donde pusimos nuestro mejor esfuerzo y corazón, y donde nos llevamos una rica recuerdo de vida. Todos creemos estar seguros de tener la convicción de haber contribuido con nuestro trabajo al engrandecimiento de nuestra vida.

Es y sigue siendo tan apasionada la mar, que a pesar de los años transcurridos desde que iniciamos nuestra vida en ella, seguimos repasando nuestros momentos vividos,con ilusión y alegría impregnada de  una impronta común para todos nosotros: El Galatea.

Un abrazo muy fuerte para  toda la promoción de 1974, y un profundo recuerdo a los que ya no están entre nosotros. 



DIARIO OFICIAL DEL MINISTERIO DE MARINA Viernes, 23 de agosto de 1974

Marinería.
Nombramiento de Alumnos Especialistas. Resolución delegada núm. 1.012/74, de la Jefatura del Departamento de Personal.
Como consecuencia de la selección clasificúión prevista en la Resolución número 108/74 (D. O. núm. 116), se promueve a la clase de Alumnos Especialistas, con antigüedad de 1 de septiembre de 1974, al personal que se relaciona, el cual se incorporará a sus Escuelas respectivas el citado día 1 de septiembre de 1974. 
MANIOBRA
1. Miguel Rodríguez López. 
2. Alfonso Otero Lanceta. 
3. Luis Miguel Deleito Guijarro. 
4. Pedro M. Gándara Ferreira
5. José Filgueira Polo
6. Celestino Gil Gil. 
7. Manuel Parodi Cebada. 
8. Carlos Iraola López. 
9. Manuel Guerra Molina. 
10. Miguel Zuaza Colón. 
11. José M. Casanova González. 
12. -Ignacio José Mateo Martínez. 
13. Arminio Sánchez Mora. 
14. Juan J. Esiquiroz Rodríguez. 
15. José Luis Pérez Zuaza. 
16. José Manuel Reviejo González. 
17. Rafael Cañones( Martínez. 
18. José Vicente López Abad. 
19. juan Ignacio Chileno Iglesias. 
20. Tomás de los A. Sánchez Aparicio. 
21. Fernando Morilla Pérez. 
22. Diego E. Fernández Ceñera. 
23. Juan José Zanico Rivas. 
24. Rafael Márquez Gandúl. 
25. José Angel Rodríguez Vázquez. 
26. Carlos Rafales Fernández. 
27. Miguel Angel Fernández Durán. 
28. Antonio Eizaguirre Ponce de León. 
29. Alfredo Portilla Piris. 
30. Vicente Pérez Planches. 
31. Teófilo Herrero Sanz. 
32. Angel Méndez Fernández. 
33. José Francisco Ruescas Hernández. 
34. Rafael Fernández Valle. 
35. Pablo Medina Varona. 
36. Francisco Olvera Olvera. 
37. luan Rodríguez Salmoral. 
38. Luis M. González Tesoro. 
39. Antonio Roldán Ramírez. 
40. Angel Valero Gutiérrez. 
41. José C. Santillán Moreno. 
42. Juan Carlos Pérez Monte de Oca. 
43. Pablo Amador Romero. 
44. Antonio Sierra Fernández. 
45. José Ignacio Pardo García. 

HIDROGRAFIA 
1. Pedro Eduardo San Emeterio Aguado. 
2. José Carlos Fuentes Caballero. 
3. Pedro Balletbo Santamaría. 
4. José M. Blanco Asencio. 
5. José Manuel Mojica González. 
6. Juan Carlos Reviejo González.
 7. Julián Fiz Hernández. 


DIARIO OFICIAL DEL MINISTERIO DE MARINA
Marinería. Ascensos.

Resolución núm. 1.608/75, del Director de Reclutamiento y Dotaciones.

A propuesta de la Dirección de Enseñanza Naval, y por haber terminado con aprovechamiento el curso "I" que han realizado en las Escuelas respectivas, se promueve a Cabos segundos Especialistas, con antigüedad de 21 de julio de 1975, y efectos administrativos a partir de la revista siguiente, a los Cabos segundos Alumnos que se relacionan :

MANIOBRA

1. Luis Miguel de Leito Guijarro. 
2. José Filgueira Polo. 
3. Manuel Guerra Molina. 
4. Miguel Zauaza Colón. 
5. Vicente Pérez Planches. 
6. Florencio Fernández García. 
7. Angel Méndez Fernández.
8. Juan Luis Zapico Rivas. 
9. José Luis Pérez Zuaza. 
10. José M. Rodríguez López. 
11. Miguel Angel Fernández Durán. 
12. Ignacio José Mateo Martínez. 
13. Pablo Medina Varona. 
14. Rafael Cañones Martínez. 
15. Manuel Parodi Cebada. 
16. Pedro Manuel Gándara Ferreira. 
17. Arminio Sánchez Mora. 
18. Alfredo Portilla Piris. 
19. Luis Miguel González Tesoro. 
20. Celestino Gil Gil. 
21. Juan Ignacio Gimeno Iglesias. 
22. José Manuel Casanova González. 
23. Fernando Morilla Pérez. 
24. Diego Fernández Ceñera. 
25. Tomás Sánchez Aparitio.
26. Francisco Olvera Olvera. 
27. Juan Rodríguez Salmoral. 
28. Carlos 'Záfales Fernández.
29. José Angel Rodríguez Vázquez. 

30. Rafael 'A. Fernández Valle. 
31. Alfonso Otero Lanceta. 
32. Antonio Sierra Fernández. 
33. Antonio Eizaguirre Ponce de León. 
34. Carlos María Yraola López. 
35. Jósé Ignacio Pardo García. 
36. Juan Carlos Pérez Monte de Ocaña. 
37. Angel Valero Gutiérrez. 
38. Juan José Esquiroz Rodríguez.
39. Oscar Teófilo Herreros Sanz.

HIDROGRAFIA 
1. José M. Blanco Asenáio. 
2. Pedro San Emeterio Aguado. 
3. Julián Fit Hernández. 
4. José C. Fuentes Caballero. 
5. José M. Mojica González. 
6. José López Abad.





Todas las fotografías aqui expuestas son aportadas y realizadas por la promoción de Septiembre de 1074.






































 Jose Luis Pérez Zuaza nos comenta su foto

Se estaba realizando  un curso para la dotación del Buque Escuela Mejicano  Cuauhtémc que se instruyó en el Galatea mientras se terminaba de construir en un astillero de Bilbao.

En las prácticas con los mejicanos  se largaba y aferraba el aparejo, mientras que Don Antonio Cartelle Pena con la gorra en la coronilla y el habano entre los dedos, agarrando el micófono decía:  ¡Gabieros y juaneteros, al pié de la jarcuia. Juaneteros arriba !.